El MIT revoluciona la energía solar
La energía solar es limpia, barata y fácil de obtener. Pero tiene las desventajas de estar disponible solo durante el día, y de ser muy difícil (y cara) de almacenar. Sin embargo, un descubrimiento del MIT podría lograr que, por fin, todos usemos electricidad generada a partir de la radiación solar.
¿Cuántas
veces hemos leído noticias referidas a la inminente solución
de la crisis energética o medioambiental gracias al uso de la
energía solar? Seguramente, muchas más de las
necesarias. Y siempre se ha tratado de proyectos a muy largo plazo,
costosos, o que por algún motivo todavía no están
funcionando. Sin embargo, un proyecto del MIT parece que por fin nos
permitirá utilizar fácilmente la energía
proveniente del sol.
Es que en el MIT, aparentemente, han
encontrado la solución al más importante desafío
que plantea la conversión de energía solar en
electricidad: su almacenamiento. En efecto, aunque sabemos cómo
transformar los rayos del sol en una corriente eléctrica, nos
resulta muy complejo su almacenamiento. Debemos consumir la energía
a medida que se genera, y no disponemos de ella durante las noches.
El uso de baterías implica un costo elevado, y en muchos casos
la manipulación de materiales poco amigables con el
medioambiente.
Pero existe un proceso simple, barato y muy
eficiente para almacenar la energía obtenida de los
tradicionales paneles solares. Los investigadores del MIT, inspirados
en el proceso de la fotosíntesis, han logrado un sistema
de almacenaje sencillo, que se basa en la descomposición del
agua en oxigeno e hidrogeno. Estos gases, que pueden almacenarse con
facilidad, se recombinan cuando el usuario necesita electricidad y se
obtiene nuevamente agua limpia.
El dispositivo del MIT sólo
necesita de materiales que son abundantes, naturales y no tóxicos.
Podría, finalmente, hacer posible el uso masivo de la energía
más barata y limpia que disponemos. "Este es el nirvana
del que hemos venido hablando durante años", declaró
Daniel Nocera, profesor en el MIT y autor del artículo que
describe el trabajo. Dicho paper fue publicado en el número
correspondiente al 31 de julio de la revista Science. "La
energía solar ha sido siempre una solución limitada y
lejana. Ahora podemos pensar en serio sobre la energía solar,
como una fuente ilimitada y a corto plazo", agregó.
Basándose
en el proceso de la fotosíntesis realizada por las plantas,
Nocera y Mateo Kanan, un becario postdoctoral del laboratorio de
Nocera, han desarrollado un proceso inédito que permitirá
utilizar la energía del sol para dividir el agua en hidrógeno
y oxígeno, que más tarde pueden recombinarse dentro de
una pila de combustible, creando electricidad (libre de emisiones de
carbono) para alimentar su casa o su coche, de día o de
noche.
Esto no tiene mucho de novedoso, ya que es un mecanismo
bien conocido. Pero el MIT ha desarrollado un componente clave para
el proceso. Se trata de dos catalizadores: uno que produce
oxígeno gaseoso a partir del agua; y otro que produce gas de
hidrógeno. Ambos funcionan a partir de la electricidad
producida por una célula fotovoltaica (o una turbina eólica
o de cualquier otra fuente, en realidad). El nuevo sistema
funciona a temperatura ambiente, y es fácil de
configurar. "Es por eso que creemos que va a funcionar. Es
tan fácil de implementar", dijo Nocera.
Nocera se
muestra optimista, y creen que en solo una década los
propietarios de casas o coches podrán obtener su propia
electricidad con este sistema. El uso de energía proveniente
desde una central será cosa del pasado.
Este proyecto
fue financiado por la National Science Foundation y por el Chesonis
Family Foundation, que donaron al MIT 10 millones de dólares
para poner en marcha el Proyecto Revolución Solar, con el
objetivo de hacer posible el uso a gran escala de la energía
solar dentro de 10 años.
Fuente: www.neoteo.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario